JAIME MIGUEL. La identidad digital es el conjunto de información que está publicada en Internet, (datos personales, imágenes, noticias, perfiles en redes, blogs…), y/o que se genera y comparte usando medios digitales. Se trata por lo tanto de una descripción en el mundo digital.
La identidad digital es cambiante en función de lo que nosotros hacemos y de lo que hacen los demás y está influenciada por el contexto. Internet ha hecho que tengamos identidades digitales parciales, orientadas a representarnos en los distintos roles que desarrollamos.
La reputación online es la opinión que los usuarios de internet tienen sobre una persona o empresa. Es una construcción subjetiva, hecha colectivamente y con una relevancia pública de la que se derivan efectos positivos o negativos.
La reputación en Internet nunca estará bajo nuestro control de forma total ni eternamente, ya que se alimenta de opiniones de otras personas sobre lo que hacemos o no. No obstante, se puede gestionar y mejorar la reputación digital, mediante la construcción de una identidad digital sólida que proporcione datos y hechos relevantes y ciertos que influyan en esas opiniones individuales o colectivas.
Por esto es importantísimo conocer nuestra presencia en Internet y gestionarla de manera responsable para que responda a nuestra identidad real y nos ayude a conseguir nuestros objetivos.
Recopilemos:
Al definir nuestra identidad digital estaremos ayudando a construir la reputación online, pero es tan solo una parte, ya que lo que los demás digan de nosotros es fundamental para nuestra reputación online.
Una buena imagen corporativa, una web cuidada, una buena planificación en redes sociales y una buena gestión de las mismas nos ayudará a crear y cuidar una buena imagen digital. Como resumen final:
- Identidad: quién soy, pienso que soy o quiero llegar a ser.
- Reputación: quién creen los demás que soy